Las autoridades talibanas de Afganistán han cortado esta semana conexiones de fibra óptica en múltiples provincias del país, en una campaña dirigida, según sostienen, a “prevenir el vicio”. La operación ha generado preocupación y ha dejado a miles de personas desconectadas en provincias del norte y sur del país, con la red telefónica, que funciona intermitentemente, como única opción para acceder a internet. Es la primera vez que se impone una prohibición de este tipo desde que los talibanes tomaron el poder en agosto de 2021, y deja a numerosas oficinas públicas y privadas, instituciones y hogares sin conexiones de internet Wi-Fi.