Abdelrahman al Milad, más conocido como ‘Al Bidya’, fue asesinado a tiros el pasado domingo en la capital de Libia, Trípoli, sin que haya de momento información sobre la autoría del ataque. Al Bidya había capitaneado una unidad de la polémica Guardia Costera libia —que recibe financiación de la UE y está acusada de vulnerar sistemáticamente los derechos de las personas migrantes— y estaba considerado uno de los traficantes de personas más buscados. 

La ONU y Estados Unidos impusieron sanciones contra él en 2018. Según la ONU, Al Bidya estaba actualmente al mando de la unidad regional de la Guardia Costera en Zauiya, “relacionada constantemente con la violencia contra los migrantes y con otros traficantes de personas“. Los expertos de la ONU apuntaron a que estaba involucrado directamente en “el hundimiento de embarcaciones de migrantes utilizando armas de fuego”.