Cerca de 3.000 personas han muerto en la ciudad de Goma, en el noreste de la República Democrática del Congo (RDC), en cinco días de combates entre el Ejército congoleño y el grupo rebelde Movimiento 23 de Marzo (M23), informó esta semana Naciones Unidas. La ciudad de Goma está ahora en manos de los rebeldes, que prosiguen su avance en el este del país. Este lunes la milicia declaró un alto el fuego de manera unilateral por motivos humanitarios, pero poco más de 24 horas después ellos mismos lo rompieron al reanudar los combates en la localidad de Nyabibwe, en la provincia vecina de Kivu del Sur. El este de RDC está desde 1998 sumido en un conflicto que enfrenta a milicias rebeldes y al Ejército, y en el que entran en juego ambiciones territoriales y de poder y, en gran medida, la lucha por el control de los valiosos recursos minerales de la zona. El M23 es una de las principales milicias, integrada en buena parte por congoleños de la etnia tutsi, con el apoyo de la vecina Ruanda. Para saber más sobre los orígenes de la milicia, os recomendamos esta pieza.

El M23 encabeza además una alianza de milicias, denominada Alianza Río Congo, que está bajo el mando del líder insurgente Corneille Nanga, quien entre 2015 y 2021 llegó a presidir la Comisión Nacional Independiente y certificó la victoria del presidente congoleño, Félix Tshisekedi, en unas controvertidas elecciones de 2018. En 2023 Nanga fundó su propio partido político (el ADCP) para concurrir a las elecciones de diciembre de ese año, en las que Tshisekedi obtuvo un segundo mandato. Tras aquello, Nanga dejó  el país y fundó, desde Nairobi, la Alianza del Río Congo, una plataforma que reunía a representantes políticos, sociales y a grupos armados, entre ellos el M23. Nanga fue juzgado en ausencia en agosto de 2023 por un tribunal militar congoleño y sentenciado a muerte —siempre en ausencia— junto con una veintena de colaboradores. Tras la toma de Goma, Nanga reapareció este jueves en una rueda de prensa organizada por el M23. “Estamos en Goma para quedarnos”, dijo, y aseguró que la milicia continuará su “marcha de liberación hasta llegar a Kinshasa”.