Nos empezamos a presentar en redes sociales el 16 de abril. Queríamos hablar desde el principio de la actualidad internacional, de lo que sucede en lugares remotos del planeta, de las historias lejanas que pueden interesar al público. Pero se ha despertado curiosidad sobre el proyecto, os hemos escuchado y queremos responder a algunas preguntas que nos hacéis sobre 5W.
1) Buscamos lectores ávidos de mundo. Su perfil es diverso. La Revista 5W no solo está dirigida a los enamorados de la actualidad internacional, sino también al público curioso dispuesto a zambullirse en la historia de una familia que ha sobrevivido al ébola o de un joven afgano reclutado para la guerra. Gente dispuesta a pagar unos cuantos euros al año para poder leer y financiar reportajes con una apuesta narrativa y audiovisual.
2) ¿Cómo lo vamos a hacer? Necesitamos socios. Muy pronto lanzaremos una campaña de micromecenazgo (crowdfunding) para que os podáis apuntar a 5W. Un avance: queremos ofrecer una experiencia integral al lector: que se pueda informar a través de la web, del papel, del sonido, de la imagen. Queremos ser cercanos: muchas de las recompensas están pensadas para que el público pueda interactuar con los que ven de cerca la noticia, por ejemplo a través de charlas on-line. Y queremos proponer cosas nuevas, como hacer coberturas específicas de temas que pensemos (los socios y nosotros) que no están recibiendo la atención que merecen. Hemos venido a jugar.
3) 5W es una idea grande, pero —por ahora— un proyecto pequeño. Tiene que crecer: el tiempo dirá si nuestra propuesta cuenta con apoyo social. De momento, aquí escucharemos con atención todo tipo de peticione. Buscamos historias de larga distancia (de ahí nuestro lema) desde el lugar donde ocurren los hechos. Nuestro flujo de producción no será comparable al de los medios tradicionales, pero a cambio nos comprometemos a trabajar el enfoque y hacer una edición concienzuda: los textos pasarán por al menos dos filtros, pediremos referencias de las personas entrevistadas y comprobaremos las fuentes. Tenemos tiempo.
En cuanto a la imagen, buscaremos tanto relatos audiovisuales en los que el fotógrafo se sumerja en la vida de las personas como ensayos fotográficos que aborden temas transversales. Pequeñas historias, grandes explicaciones. Lo que estamos creando ahora es una plataforma para hacerlo posible. Y eso supone pagar a los colaboradores. Todo lo que publiquemos se pagará, sin excepciones. El trabajo tiene que remunerarse.
4) Pedimos paciencia. Aún no hemos nacido y estamos abiertos a las propuestas de colaboración que lleguen, pero tenemos que ir paso a paso. Queremos tratar bien al lector y al periodista. Queremos publicar lo que nos gustaría ver y leer. Creemos que hay público suficiente para sostener un proyecto que apuesta por un número limitado pero trabajado de publicaciones cada semana, bien pensadas y seleccionadas. Esta no es una revista cerrada, ni elitista, ni para “amigos”. Hay espacio para mucha gente, pero el ritmo es lento.
5) La Revista 5W es un proyecto abierto. En todos los sentidos: está abierto a cubrir todo tipo de asuntos internacionales (políticos, sociales, económicos, militares y sobre todo humanos), pero también está abierto a las colaboraciones. No nos gusta decir colaboraciones externas porque cualquiera que escriba o fotografíe para nosotros formará parte de la idea 5W. Queremos crónicas, reportajes, entrevistas, fotos y vídeos de todo el mundo. Eso sí: no somos un periódico ni lo pretendemos. No somos una ONG ni lo pretendemos. No somos activistas, sino sobre todo periodistas. Tampoco somos una agencia de noticias: no buscamos dar noticias de última hora (una ardua labor), sino entender para explicar, ofrecer contexto, poner cara y voz a los que sufren y hacen sufrir. No queremos repetir ni hacer ruido, sino descubrir: viajar desde Lesotho a la estación de trenes de Dorasan. De Bojayá a Jaffna. De Donbass a Kobane. De Bangui a Bossangoa.
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