Texto: Leila Nachawati Fotografía: Muhamad Najem / Qusay Noor Cuando en 2011 se extendió por el sur del Mediterráneo un movimiento popular que reclamaba derechos fundamentales, se abrió también una ventana a la libertad de expresión sin precedentes en la historia reciente de la región. Personas que llevaban décadas viviendo bajo estados totalitarios formaron parte de unas protestas que comenzaron en Túnez y Egipto y se extendieron, con ecos de distinta magnitud, al resto del mundo. Ocho años después, en un contexto de represión y polarización cada vez mayor, quienes alzaron la voz para reclamar dignidad, justicia y libertad han pagado un precio muy alto. Muchas de aquellas personas han sido asesinadas, detenidas u obligadas a exiliarse, a la vez que se ha ido imponiendo un relato en torno a la región basado en cuestiones identitarias…
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