¿Cuánto tiempo durará ‘5W’? Depende de ti

Nuestro plan de supervivencia a corto plazo ha funcionado, pero el bajón de las suscripciones hace peligrar nuestro proyecto. Estas son las cuentas del ejercicio 2022-23.

¿Cuánto tiempo durará ‘5W’? Depende de ti
Ilustración de Cinta Fosch

Cuando tienes entre manos una cosa tan bonita como 5W, piensas que es infinita. Últimamente estamos descubriendo que no lo es. Periodismo narrativo que mira al mundo, fotografía, podcast, columnas literarias, análisis, espíritu crítico… Hemos construido todo eso en los ocho años que cumplimos esta semana. Y lo hemos hecho gracias a las más de 4.300 personas suscritas a la revista, ya sea en su versión digital o completa; y también gracias a las que compran nuestros libros y productos editoriales. No es una forma de hablar: desde nuestro nacimiento, los ingresos por estos conceptos han supuesto un 80-90% del total, así que la dependencia es absoluta. El problema es que cada vez son menos personas: las suscripciones y las ventas han bajado y suponen ahora un 73% del total. 

Cerramos el ejercicio 2022-2023 en verde gracias al plan de choque que lanzamos para salvar la revista, pero por primera vez hemos perdido socios y socias: casi 300 en un año. Es algo que nos preocupa y que queremos revertir. Porque sin suscripciones no hay 5W. Tenemos otras fuentes de ingresos que estamos explotando, pero nuestro sustento es el de la gente. No hay otra forma de sobrevivir para un medio como el nuestro. Somos plenamente conscientes de ello. Por eso, cuando nos preguntan cómo va la revista, la respuesta es clara: depende de la gente que nos apoya. Depende de ti. 

Si nos quieres ayudar, suscríbete a 5W, ya sea en la modalidad digital o con papel. Si puedes, amplía tu cuota. Compra nuestros productos editoriales. Haz que corra la voz. Y así nos darás aire para seguir muchos años más. 

Necesitamos ese aliento.

Cumplimos ocho años

El 22 de septiembre de 2015 nacía la revista 5W con la ambición de acercar el mundo, a través del periodismo narrativo y la fotografía, a una comunidad maravillosa que se ha ido consolidando con los años. Desde entonces 5W se ha asentado como medio, hasta contar con una redacción de ocho personas (seis a jornada completa y dos a media jornada) y una red decenas de colaboradores: en estos años han firmado más de 300 periodistas, fotoperiodistas y escritores/as, al tiempo que hemos cimentado una comunidad interesada en leer, ver y escuchar un periodismo atento al mundo y hecho con mimo y profundidad.

Hace un año, en un contexto de incertidumbre generalizada, alertamos de que el ritmo de suscripciones se había frenado y pedimos ayuda, porque las perspectivas no eran buenas. Y respondisteis: muchos de vosotros aumentasteis la cuota, hicisteis donaciones, os quedasteis en 5W, nos preguntasteis cómo ayudar. Gracias: aquello nos dio un aire y un impulso necesario, económico y moral, para seguir adelante.   

Pero aquel impulso pronto perdió fuerza. La tendencia general a la baja se mantuvo y pasamos de 4.600 a 4.300 socios/as. La gran mayoría, un 69%, sigue eligiendo la opción papel; un 25% es socio/a digital, bien anual o trimestral; y un 6% nos ha dado un empujón extra con la cuota de mecenas. 

El frenazo en las suscripciones nos llevó a tomar una decisión difícil el pasado junio: por primera vez desde 2015, subimos la cuota. Aquí te explicamos las razones. Esa subida —junto a la explotación de otras fuentes de ingresos que detallamos en el próximo apartado— ha sido la que nos ha permitido mantenernos en verde en los últimos meses. En contra de lo que pensábamos, esta decisión no hizo que el ritmo de bajas aumentara. El problema que tenemos ahora es que no estamos consiguiendo nuevas suscripciones. 

Necesitamos que la comunidad 5W crezca. Si sigue la tendencia a la baja, no podremos seguir. Nuestra pasión sigue intacta: queremos ser el medio que cuenta lo que pasa en el mundo, que da contexto y pone el foco en realidades olvidadas que importan más que nunca. 

Si todavía no lo eres, plantéate hacerte socio/a. Si aún tienes dudas, vamos a intentar convencerte con este ejercicio de transparencia que es la rendición de cuentas anual, y que también aprovechamos para explicar lo que hemos hecho desde el punto de vista editorial. 

Los ingresos

En este periodo han entrado en nuestras arcas cerca de 408.000 euros. Si el año pasado el 90% vino de suscripciones y ventas de revista en papel, este año el porcentaje ha pasado a ser del 73%. Esto es un reflejo natural de la caída de las suscripciones, pero la cifra sigue revelando cuál es el pilar de 5W: casi 3 de cada 4 euros proviene de las personas que nos leéis y apoyáis.

La reducción de esa partida se ha compensado con el refuerzo de otras: algo más de un 9% de lo ingresado en nuestra cuenta en los últimos doce meses proviene de proyectos conjuntos y patrocinios, como el podcast sobre El mundo en 2023 y otras acciones enmarcadas en un acuerdo estratégico con CIDOB, la alianza con la fundación We Are Water o ayudas como la de la fundación Elkano a la publicación de En el fondo la forma, el número 7 de la colección Voces 5W, protagonizado por Leila Guerriero y Ander Izagirre. Los ingresos por publicidad en forma de banners en web o anuncios en la revista en papel siguen siendo una fuente mínima. 

Este año otra partida de especial relevancia en nuestras cuentas ha sido —a diferencia del anterior— la de ayudas y subvenciones. En los últimos doce meses hemos ingresado dos ayudas de fomento a la contratación —concedidas en el ejercicio anterior, pero que aún no habían entrado en nuestra cuenta— y una ayuda del Ministerio de Cultura a la edición de revistas culturales. En total, esta partida ha representado cerca del 6% de los ingresos. Muy poco comparado con las suscripciones y las ventas. 

Aunque las dos partidas anteriores nos han permitido afrontar los gastos, somos conscientes de que este tipo de ingresos no son estructurales: nos han dado un empujón este año, pero no son recurrentes. Por eso queremos apuntalar nuestra comunidad, que desde el principio es el alma de 5W

El resto de ingresos ha venido de talleres, charlas y presentaciones, exposiciones, sindicación de contenidos y colaboraciones con otros medios. 

Los gastos

La subida generalizada de costes y el aumento de nuestra plantilla y de las publicaciones semanales se han reflejado también en los gastos, que en los últimos doce meses han rondado los 397.000 euros (11.000 euros por debajo de los ingresos). Es un resultado producto del plan de choque (subida de cuotas y refuerzo de otras fuentes de ingresos) que concebimos después de registrar el año pasado unas pérdidas de unos 30.000 euros.

La principal partida de gastos sigue siendo la destinada al motor de 5W: plantilla, periodistas y fotoperiodistas y profesionales del diseño y la ilustración. Los salarios y pagos de colaboraciones periodísticas han supuesto cerca del 62% del dinero que ha salido de nuestras cuentas; a ello se suman los gastos de las coberturas —transporte, dietas, traducciones—, que han supuesto un 1,5%, menos de lo que quisiéramos invertir en este apartado.

El papel y la web, las otras señas de identidad de 5W, son el destino de otra de las grandes partidas del presupuesto. Los gastos de impresión y distribución de los productos en papel han ascendido ligeramente respecto al año anterior (11,4% frente al 11% de hace doce meses). El mantenimiento de la web y las herramientas digitales han representado cerca del 7%.

El resto de los gastos corresponde a otras partidas como gestoría, impuestos, organización de presentaciones y eventos y gastos de oficina.

Periodismo contra viento y marea

¿Quién paga esto? ¿A qué se destina el dinero? Os damos todos estos detalles porque queremos ser transparentes y que sepáis cómo gestionamos la empresa. No tengáis ninguna duda: todo esto está al servicio de nuestra auténtica obsesión, el periodismo. 

Este último año hemos publicado más crónicas de larga distancia que nunca. Reportajes desde Mozambique, Libia, México o Armenia que desentrañan realidades complejas de nuestro tiempo a través de miles de palabras, todas y cada una de ellas bien cuidadas, y un trabajo fotográfico ingente. 

Nos aliamos con Baynana —el periodismo será cada vez más colaborativo, o no será— para publicar una investigación sobre el naufragio de un pesquero con 750 personas a bordo el 14 de junio en el mar Mediterráneo: los supervivientes dieron la vuelta al relato oficial y culparon a la Guardia Costera de Grecia de lo ocurrido. Contamos cómo las redes de tráfico de personas convierten a los refugiados en mercancía en Libia. Y, desde el mar, explicamos a través de fotografías cómo las barcazas de metal están aumentando la mortalidad en el Mediterráneo. 

El clima y el medioambiente nos importan. Gracias a otra alianza, con Ruido Photo, contamos a través del cangrejo azul cómo está cambiando la biodiversidad del Mediterráneo y por qué nuestro mar ya no volverá a ser el mismo. Publicamos un reportaje fotográfico sobre cómo el aguacate está degradando el suelo de Chile (ha sido la pieza más leída del año). 

La salud mental también nos importa. Nos fijamos en cómo una app diseñada por el Gobierno de Estados Unidos castigaba la salud mental de las miles de personas que intentan cruzar el muro desde México, y también viajamos a Mozambique para explorar el estado psicológico de las centenares de miles de personas que huyeron del conflicto en el norte del país. La reflexión sobre lugares y conflictos alejados de los focos es una de las especialidades de nuestra revista: más allá de Ucrania, este año hemos mirando también hacia Sudán, Afganistán o el Cáucaso.

Una de las grandes novedades este año ha sido el lanzamiento de una sección de columnas literarias. Son fogonazos en los que se entremezclan el olor de las calles, el tacto de lugares cercanos o remotos y la reflexión sobre un planeta en perpetuo cambio. Contamos ya con una buena nómina de escritores y escritoras que están mirando al mundo subidos a estas columnas. 

¿Y qué pasa con nuestros productos en papel? La revista en papel de este año, Agua, ha demostrado abordar un tema más vigente que nunca: por exceso o por defecto, el agua ha sido una de las grandes protagonistas de este año. Huyendo de una visión preciosista del agua, la revista viaja por ríos, océanos y mares para pensar de forma humanista la vida del líquido más esencial. 

En el apartado sonoro, la creciente audiencia de nuestros podcast mensuales nos confirma que este formato está más vivo que nunca. El podcast El mundo en 2023 fue el más escuchado de la pasada temporada. Le sigue Qatar, publicado con motivo de la celebración del Mundial en ese país. Y cierra la lista de los tres más escuchados el podcast sobre el Sáhara Occidental

En los últimos doce meses, además, nuestra newsletter sonora, El Rickshaw, ha acercado cada semana un resumen de la actualidad internacional a quienes formáis parte de nuestra comunidad. Lo publicamos y emitimos cada sábado, pero se puede leer o escuchar en cualquier momento. Nos dicen, por cierto, que hay docentes en España que están usándolo como herramienta en las aulas para abrir una ventana al mundo. Son el tipo de noticias que nos animan a seguir adelante. Porque eso es lo que da sentido a lo que hacemos: intervenir en el debate público, contribuir a la transmisión del conocimiento, aportar nuestro granito de arena a entender un mundo imposible de entender. 

Queremos seguir haciéndolo durante muchos años. 

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